miércoles, mayo 31, 2006

Luthier: Médico y partero de instrumentos.


Anoche se me dañó mi mandolina. La tenía en la mano y de repente la cuerda Mi sonó de forma extraña, y noté que la cejuela se partió. El proximo miércoles tengo una presentación, y no creo que la tenga reparada antes, así que me van a prestar una. He pasado el día algo deprimido por mi mandolina. Cuando a uno se le daña un instrumento, es como tener a un hermano o un hijo enfermo. Ahora voy a ir donde mi luthier para que me haga el cambio de cejuela, y así aprovecho de mandarle a revisar algunos detallitos más. Uno cuando se refiere a un buen músico no le presta mucha atención a las personas que han hecho grandes aportes para que uno disfrute de esa calidad artística. Tal vez se tenga curiosidad por conocer dónde estudió, quién fue su maestro, en qué escenarios se ha presentado, la amplitud de su repertorio, reconocimientos, concursos y premios, etc. Pero casi nunca pensamos en la persona responsable de proveerle y repararle su instrumento. Es más, nos asombramos cuando escuchamos por primera vez la palabra "luthier". Para mí, el Luthier es el médico de los instrumentos. El que se encarga de su salud, el que conoce los cuidados,el tratamiento, la cura, cada detalle. Y no solamente se encarga de las reparaciones, entre sus habilidades tenemos la de hacer y crear instrumentos. Es el partero que asiste a la música para que se haga materia y se transforme en el instrumento que en nuestras manos haga vibrar nuestros corazones. El Luthier es, sin duda alguna, el héroe anónimo de todo buen músico. No es una profesión fácil. "La luthería es un mundo interminable de aprendizaje, complicado pero fascinante, donde hay que cuidar cada detalle", comenta Yleana Bonsanto. Prosigue: "El Luthier no necesariamente debe tener conocimientos de música, pero tenerlos le facilita el trabajo. Lo que se requiere es que el aprendiz tenga ganas de formarse, curiosidad y mucha seriedad, la edad no importa,puede ser joven o mayor, sólo es primordial el deseo de aprender" Yleana Bonsanto tiene casi 25 años de experiencia, estudió en Cremona (Italia)y tiene su taller en San Bernardino, Caracas. Entre sus sueños está hacer una escuela para transmitir sus conocimientos.

martes, mayo 30, 2006

¿Quieres estudiar Música?


-Buenos dias, profesor. Aquí traigo a mi hija para inscribirla en su clase de guitarra. Quisiera saber las condiciones, horario, modalidad... Mientras la señora me habla, fijo mi mirada en la joven, de unos once años, apariencia tímida, con una guitarra que se ve nueva en su estuche. -Bien, señora, -le dije- permítame un momento hablar con la muchacha. La aparto un poco, de manera que pueda hablar con ella fuera de la mirada de la madre. -Hola,¿Cómo te llamas? -Isabel. -¿Qué edad tienes? -Once. -¿Quieres estudiar Música? Se quedó pensativa...con temor a la mirada de la madre, o al menos que la estuviera escuchando.Contiuné. -Respóndeme, con el corazón. -Mi mamá quiere que estudie guitarra.-respondió con timidez- -¿Y tú? -Yo no. Yo suspiré. Y le regalé mi mejor sonrisa,mientras le daba las gracias de corazón, por ese gesto de sinceridad y sobre todo de valentía. Una cosa es que a uno le guste la música, otra es querer ser músico. Muchas veces los padres (nuestros padres, o nosotros como padres)empujan hacia el estudio de la música a sus hijos,cuando éstos no tienen deseo de hacerlo. Le compran caros instrumentos, los inscriben en caras academias, hacen una inversión de tiempo y dinero...hasta que algún día (Gracias a Dios,por fortuna para la música) la bomba estalla y el joven confiesa una verdad más grande que el sol: No quiero ser músico. ¿Cuantas malas experiencias se han generado con la música, por el estudio obligado?. Claro, esto pasa con cualquier otra profesión, pero trato ésta porque me duele escuchar sobre vivencias de personas que pasaron por esto en la infancia,quedando malos recuerdos sobre el estudio musical. Inscribimos a los niños en la escuela, sin consultarle. Los bautizamos e inscribimos en primera comunión, sin consultarle. Ya ves, no siempre resulta mal,mucha veces funciona. Pero otras no. También pasa con niños, que aún teniendo vocación y aptitud musical, se le asigna arbitrariamente un instrumento el cual no le gusta; a veces por la disponibilidad, otras por conveniencia. Pero sea cual sea la razón, el que estudia música debe hacerlo porque quiere y con el instrumento con el que se sienta a gusto. Cuando me preguntan ¿qué es lo más difícil de estudiar música? siempre respondía: "Tener el instrumento". Ahora me atreveré a responder: QUERER ESTUDIAR MÚSICA.

sábado, mayo 27, 2006

Oído Musical


-¿Te gusta la música? -Sí, mucho. -¿Qué música te gusta escuchar? -De todo un poco, pero la romántica es mi preferida. Amo a Ricardo Montaner. -¿Te gusta cantar?, ¿cantas? -Me gustaría cantar, pero es que no tengo oído. -¿No tienes oído?, ¿Cómo es eso? -No tengo oído musical, me gusta cantar pero desafino mucho. Oído Musical (mi opinión personal) Yo creo que nos referimos a "Oído Musical" a la manera en que cada quien percibe la música. A veces englobamos incluso la manera en que se ejecuta un instrumento, o se canta, y creo entonces que se trata de dos asuntos distintos. Uno, percibir. Dos, ejecutar. Si percibo "mal", voy a ejecutar mal. Pero si percibo "bien" puede que ejecute bien, pero también que ejecute mal. A ver si me doy a entender. Escucho una canción y al cantarla estoy desafinando y no sé que estoy desafinando; percibo "mal", y ejecuto mal. Ahora, escucho la canción y al cantarla desafino y sé que desafino; entonces percibo bien, pero ejecuto mal. Sin embargo, es un avance estar conciente que estoy desafinando. Y por último, escucho la canción y la canto afinado; percibo "bien" y ejecuto "bien", éste es el que denominamos "con oído musical". La percepción musical es educable, desde mi punto de vista. Tenemos una capacidad innata de percepción musical, como para el lenguaje; como se sabe nadie nace hablando. Es algo que se educa, se forma, se desarrolla. El maestro de música nos orienta, enseña y poco a poco nos va ayudando a desarrollar ese "oído musical". Para mí, todos tenemos derecho a desarrollar esa capacidad de percepción musical, y hacer música no necesariamente depende totalmente del oído, porque el caso de los músicos sordos lo demuestra. Y si un sordo puede hacer y disfrutar música ¿Por qué los demás no? Allí es donde tenemos una gran responsabilidad los docentes musicales (según nuestros conocimientos y herramientas), en garantizar el derecho a la música que tenemos todos. Un detalle que me parece importante aclarar. Lo de "oído musical" no se limita a la afinación(altura), también se aplica a las otras características de la música, como el ritmo (adelantarse o quedarse atrás), la intensidad (tocar muy alto o muy bajito) el timbre, etc. Con respecto al canto, también influye lo que se conoce como "tesitura de las voces"" en tu afinación. Si no conoces el registro de tu voz, puedes estar desafinando por cantar fuera de la clasificación de tu voz y a la larga causarte daño en las cuerdas vocales. A veces nos ponemos a cantar canciones de nuestros artistas favoritos en su mismo tono, y resulta que nos queda muy alto o muy bajo. Si no tienes "oído musical" no importa, la música también es para tí.

lunes, mayo 22, 2006

Despotismo de los Músicos


"El comportamiento y trato de los músicos con otros músicos es una historia de larga data, lo podemos observar en diferentes etapas de la historia de la música de Venezuela. Se refiere a la conducta aberrante del despotirmo, donde el que tiene el conocimiento de la música, bien sea empírico o académico, ha creído estar poseído por una cualidad adjudicada por la providencia, que a veces piensa que el prójimo debe rendirle pleistesía. Los músicos que se formaron en generaciones pasadas tenían una forma despótica de trato para con los aprendices; algunos le atribuyen ésta conducta a"..."la falta de un conocimiento realmente pedagógico y didáctico"..."En el transcurrir del tiempo nos ha tocado vivir una gran secuela de confrontaciones con éste fenómeno(despotismo)que a ciencia cierta se hace complejo,"..."ha sido un elemento de perturbación con respecto a llevar una buena relación personal dentro de ciertas agrupaciones, las cuales se han visto en extinción producto de ésta conducta caudillista de ciertos directores o integrantes"... Es tal la trascendencia del problema que hasta los movimientos musicales, e inclusive géneros, se han desvanecido al nacer, por la presencia de ésta forma de conducirse de algunos directores que maltratan a su alumnos"...
(Santiago Key: "Despotismo de los músicos". Todos Adentro No.109,20 de Mayo de 2006)

domingo, mayo 21, 2006

Musica, Valores y Belleza.


En Mayo de 2005 hice un trabajo sobre la Música como herramienta para la educación en Valores, según el currículo básico nacional. Quiero hacer algunas modificaciones, y por recomendacion de algunos profesores voy a incluir el valor de la belleza. En una entrada anterior, màs o menos asomaba el enfoque que quiero darle. Si nos formamos en el valor de la belleza, tal vez la música que creamos dejaria de ser tan comercial, y se volcaria a la esencia del arte musical. Si cada vez se nos hace más difícil ver la belleza en la música,¿a dónde vamos a parar? nos invadirán los sonidos, pero nos abandonará la música. Educar en la Belleza, para vivir la música, y muchas otras cosas más que nos hacen tanta falta. La Música como herramienta para la educación en Valores

sábado, mayo 20, 2006

Educar en Valores

Educar en valores hoy pareciera un tema que por actual pudiera resultar facíl y atractivo; en el primer caso, no es facíl; en el segundo, el deseo de hacer un aporte, que más que sensacional sea útil a los educadores, es la mayor atracción. En la actualidad nos encontramos sumergidos en una vorágine desconcertante que nos envuelve en un remolino de dudas e insatifacciones. El hombre pareciera haber perdido el rumbo hacia la meta en su plenitud total. En este verdadero desconcierto, parece que se hubiera olvidado que el ser humano no sólo posee una capacidad cognoscitiva, con la que emite juicios, sino también es capaz de valorar las cosas, los hechos y las personas y jugar sobre ellos. Es por eso que el presente trabajo propone educar los valores y orientar cómo formase para tal fín. La profesora Maria Guadalupe Ramos tiene muchos años trabajando en esa linea de investigación, paralelamente a la del desarrollo de la creatividad, es Editora-Directora de la revista Ciencias de la Educación, publicación periódica de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Carabobo. Se produce como resultado de la ejecución de la política editorial del Fondo de Publicaciones del Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico de la U.C., CDCH-UC. Revista Ciencias de la Educación
Miércoles 17 de mayo de 2006 ¿Qué es CULTURA? El uso de la palabra CULTURA fue variando a lo largo de los siglos. En el Latín hablado en Roma significaba inicialmente “cultivo de la tierra”, y luego, por extensión metafóricamente, “cultivo de las especies Humanas”. Alternaba con civilización, que también deriva del latín y se usaba como opuesto a salvajismo, barbarie o al menos rusticidad. Civilizado era el hombre educado. Desde el siglo XVIII, el romanticismo impuso una diferencia entre civilización y cultura. El primer término se reservaba para nombrar el desarrollo económico y tecnológico, lo material; el segundo para referirse a lo “espiritual”, es decir, el “cultivo” de las facultades intelectuales. En el uso de la palabra “Cultura” cabía, entonces, todo lo que tuviera que ver con la filosofía, la ciencia, el arte, la religión, etc. Además, se entendía la cualidad de “culto” no tanto como un rasgo social sino como individual. Por eso podía hablarse de, por ejemplo, un hombre “culto” o “inculto” según hubiera desarrollado sus condiciones intelectuales y artísticas. Esto es hoy muy frecuente. Las nuevas corrientes teóricas de sociología3 y la antropología4 contemporáneas redefinieron este término, contradiciendo la conceptualización Romántica. Se entiende CULTURA en un sentido social. Cuando se dice “CULTURA China”, “CULTURA Maya” , “CULTURA Venezolana” se está haciendo uso muy distinto de aquel, se refiere a los diversos aspectos de la vida en esas sociedades. En general, hoy se piensa a la CULTURA como el conjunto total de los actos humanos en una comunidad dada, ya sean éstos prácticas económicas, artísticas, científicas o cualesquiera otras. Toda práctica humana que supere la naturaleza biológica es una práctica cultural. Con el aporte de la antropología, la cultura debe incluir: bienes materiales, bienes simbólicos (ideas), instituciones(canales por donde circula el poder: escuela, familia, gobierno), costumbres(reunirse para cenar entre gente amiga o familiares) , hábitos , leyes y poder (ya que este también es parte de la cultura). Entonces podemos decir que toda sociedad tiene cultura, y toda cultura es puesta en práctica, por las personas que se interrelacionan. Toda cultura se manifiesta en una sociedad. A lo cual cabe decir que sociedad es igual a la cultura. Son la misma cara de una moneda. La cultura no es algo que se tiene (como generalmente se dice), sino que es una producción colectiva y esa producción es un universo de significados, ese universo de significado está en constante modificaciones. La cultura no puede ser vista como algo apropiable. Es una producción colectiva de un universo de significados que son trasmitidos a través de las generaciones. ¿Es correcto decir que el Profesor de Música es el encargado en la escuela de organizar los “actos culturales”? ¿Qué son y cuales son las “manifestaciones culturales” del venezolano? ¿Cuáles son las “formas tradicionalmente conocidas como cultura”? ¿Se limita a música, danza, pintura, teatro, etc.? Entonces, ¿QUÉ ES “CULTURA” PARA EL VENEZOLANO?
Jueves 11 de mayo de 2006 Belleza y Música ( I parte) La belleza es algo sobre lo que se ha escrito muchísimo, y se seguirá escribiendo, porque el hombre está en evolución, al igual que lo bello. Llegado a este punto, hay que plantear una hipótesis sobre la que basarse, y para mí está muy claro: es obvio que existe la belleza objetiva. Belleza objetiva es aquélla que en cualquier circunstancia produce un mismo tipo de sensaciones. Pero la sensibilidad es algo "a educar", y fruto de esta mala educación de la sensibilidad pueden existir gustos que sean verdaderas aberraciones. Por muy raro que parezca, habrá cosas que serán siempre bellas por encima de nuestros gustos personales, o de nuestros gustos como personas insertas en la historia, en una época. Igualmente habrá cosas que verdaderamente carezcan de belleza y que nosotros apreciemos en demasía. Pero, ¿quién dice lo que es bello y lo que no? ¿quién dice qué es arte y qué no? ¿por qué no puede ser arte un simple vaso de agua encima de la mesa? En realidad existen cosas bellas por encima de nuestros gustos personales. Se trata de desvincular a la belleza como una simple sensación y convertirla en algo trascendente al hombre y que lo supera como ser perecedero. La belleza en sí es algo que trasciende al hombre, algo imperecedero muy por encima de nuestra capacidad para juzgar en cada momento. Sólo si pensamos de esta forma podemos comprender por qué hay tantas opiniones sobre lo que es bello y lo que no, y por qué sin embargo sí que existe una belleza trascendente. Un vaso de agua encima de una mesa, por sí solo no es bello, sin embargo si a ese vaso le atraviesa un rayo de sol que se descompone al pasar por él, entonces se ha producido algo que hace a ese vaso diferente de los demás vasos, que le confiere un carácter especial. Aún así podríamos caer en el error de considerar todo lo anecdótico como bello. Ahora centrémonos en el arte para estudiar la belleza, pues el arte es la expresión más verdadera del hombre de cada época, sin tapujos ni malinterpretaciones, el arte de cada época es el reflejo del pensamiento humano en ese momento. Estudiemos la belleza en la música, mayor exponente de todas las artes debido a su universalidad. Lo fácil es entristecerse cuando oímos una canción, obra o pieza en modo menor, y sentir alegría cuando oímos una en modo mayor. Aunque esto no siempre ocurre así, debido a la universalidad del lenguaje musical, ¿pero no es cierto que muchas veces oímos una música, vemos un cuadro, o simplemente vemos a una persona bella, y produce de inmediato unas sensaciones en nosotros que nos hacen vibrar e identificarnos de forma inmediata con ello? entonces... ¿eso tiene que ser belleza, no? Pues querido amigo, sí, eso es belleza, pero esa belleza no es ni la mitad de "bella" que la belleza profunda: La belleza verdadera no se nos muestra de inmediato, todo lo contrario, muchas veces se nos hace cotidiana y no nos damos ni cuenta, y cuando nos percatamos, vemos que esta cosa es muchísimo más bella que aquello que nos parecía bello a simple vista. El ejemplo más claro para mí se encuentra en la música: existen muchas piezas con una belleza inconmensurable, tan bellas tan bellas que dejan de ser bellas y se convierten en superficiales. La belleza verdadera, la que trasciende, no es aquélla que mueve nuestros sentimientos pasionalmente, es una belleza tranquila, reposada, y con un contenido conceptual muy por encima de la belleza inmediata y totalmente perenne. Pero no todos estamos capacitados para poder apreciar esta belleza, porque esta belleza verdadera no se nos presenta directamente, todo lo contrario. Precisamente nuestra sociedad actual es muy pasional y vigorosa, muy visceral, y no es capaz de sentarse a pensar y apreciar lo que no produzca belleza a primera vista. Esto no es algo nuevo; ha ocurrido durante épocas de la humanidad ¿si no, por qué Wagner era abucheado, o el propio Verdi, cuando presentaban músicas innovadoras? No sólo se trata de rechazo hacia lo nuevo y desconocido, ni mucho menos es esa la principal causa. Por contraposición, se trata de falta de capacidad para apreciar la belleza que no se nos aparece directamente, la belleza que no nos resulta pasional en un primer momento. Quizás por esta misma razón ahora al escuchar música experimental o politonalista, al escuchar cualquier pieza abstracta de cualquier compositor "moderno", no seamos capaces de apreciar la verdadera belleza que posee, aparentemente no "estamos preparados", pero en realidad sí que lo estamos, porque no hay nadie más preparado que el propio hombre para aprender de sí mismo (para apreciar la belleza hay que "aprender"). Esta es la belleza objetiva, y ésta es la manera de buscarla. Estoy convencido de que existe. Prof. Daniel Mateos Moreno.

Lino Gallardo


Jueves 11 de mayo de 2006 Lino Gallardo Nació en Ocumare del Tuy (Edo. Miranda) probablemente en 1773 y murió en Caracas el 22 de diciembre de 1837. Lino Gallardo se destacó como compositor de canciones patrióticas, director de orquesta y ejecutante del violín, violonchelo y contrabajo. Fue discípulo de Juan Manuel Olivares y perteneció al grupo de la Escuela de Chacao. El 26 de diciembre de 1794, Gallardo contrajo matrimonio con María del Carmen Araujo y al enviudar se casó con María Catalina Pereira, el 30 de abril de 1799. Este mirandino compuso la música de la Canción americana, escrita años antes por los conjurados de 1797. Gallardo estuvo comprometido en las conspiraciones de 1808 y 1810 y fue miembro de la Sociedad Patriótica. Después de la caída de la Primera República (julio de 1812), fue apresado en las bóvedas de La Guaira por sedicioso (15 de diciembre de 1812) En 1818, bajo el régimen realista, fundó la Sociedad Filarmónica de Caracas, que era escuela de música y sociedad de conciertos a la vez; Gallardo fue el director de la orquesta de conciertos, director y profesor en la escuela. El 9 de agosto de 1824, Lino Gallardo fue nombrado maestro mayor de música de Caracas. Gallardo fue amigo y compadre de Simón Bolívar y este le compensó de su actuación al lado de los patriotas, nombrándolo fiel de peso en la aduana de La Guaira (1827). A Lino Gallardo se le atribuye, si no la música, al menos la participación en la canción patriótica Gloria al Bravo Pueblo, que en 1881 fue decretada Himno Nacional. Investigaciones del estudioso de la historia de la música, Alberto Calzavara, han replanteado el tema de la posible autoría de la música de dicha composición por parte de Gallardo.

Jueves 20 de abril de 2006 Las Escuelas de Música no quieren desafinar Actualmente se encuentra en estudio la transferencia de las Escuelas Nacionales de Música, que dependen del CONAC, hacia el Ministerio de Educación y Deportes. Los profesores Roberto Mora y Milagros Blanco consideran necesario que el cambio sea producto de mesas de trabajo que garanticen un futuro mejor para los interesados y acabar con la incertidumbre que ha generado la falta de respuesta a una serie de interrogantes planteadas a las autoridades del sector. "La carrera de un músico está hecha con mucho amor y son unos estudios muy largos, por lo que deberíamos ser considerados patrimonio cultural" afirmó Mora, profesor de piano. Los títulos de los egresados en las escuelas de música no son reconocidos y eso desmotiva a los estudiantes. Las escuelas que están involucradas en la transferencia son: Prudencio Esaa, Lino Gallardo, Pablo Castellanos, Pedro Nolasco Colón, José Reyna y el Conservatorio Nacional de Música Juan José Landaeta. (Tomado de Ultimas Noticias, 19-04-2006, pag. 77)

Miércoles 19 de abril de 2006 CEDIAM - UCV Los profesores Walter Guido y Eduardo Kusnir fundaron en 1992 el Centro de Documentación e Investigaciones Acústico-Musicales de la Universidad Central de Venezuela ( CEDIAM-UCV), como un espacio para la documentación informatizada y para la divulgación de la información musical procesada tanto a nivel nacional como internacional, así como también para la investigación musicológica y del sonido. Es una unidad adscrita a la Biblioteca Central – UCV y cuenta con una amplia colección de manuscritos y documentos musicales, partituras, tratados, obras referenciales, libros, folletos, material sonoro, material audiovisual y microfilmes. Es un recurso y fuente de investigación para profesores, estudiantes y tesistas tanto de la UCV como de otras universidades; igualmente atiende solicitudes de usuarios en general interesados en el hecho musical. El centro ofrece además un conjunto de servicios entre los que se encuentra la consulta, en forma personal, telefónica, postal y por correo electrónico; referencia especializada a cargo de referencistas expertos que ayudan a enriquecer la información contenida en los diferentes materiales con los que se cuenta en el centro; pero además hay centro de reproducción para el material impreso, microfilmes y de todos los formatos sonoros siempre que se cuente con la autorización del derecho de autor. (Tomado de HORA UNIVERSITARIA, Año 22, Número 191 Marzo 2006)

Educacion Musical para Zurdos

Miércoles 29 de marzo de 2006 Educacion Musical para Zurdos Hoy estuve comentando con un compañero de estudio, sobre las implicaciones de ser zurdo cuando se decide aprender a tocar un instrumento musical. Verdaderamente que tiene su mérito, adquirir destrezas en un mundo hecho para derechos. No todos los instrumentos musicales pueden adaptarse a la necesidad de un zurdo. ¿Alguna vez han sido discriminados? ¿Los obligan a aprender a lo "derecho"? ¿Como se sienten? ¿Que papel juega el docente en la adquisicion de destrezas musicales apropiadas para niños zurdos? Empezó como una reflexión, pero vale la pena profundizar al respecto.



Marcel Montcourt: Jóven Cuatro Solista.

Jueves 23 de marzo de 2006 Marcel Montcourt: Jóven Cuatro Solista. Marcel Montcourt(centro) junto a los maestros Cheo Hurtado(izq) y Hernán Gamboa (der) en la UCV (25-11-2005) He recibido los saludos de un personaje muy especial:un jovencito que se perfila como uno de los máximos exponentes de nuestro folklore. Marcel Montcourt (Caracas,9-11-1994) se encuentra radicado en Puerto La Cruz, estado Anzoátegui. Comienza sus estudios musicales poco antes de cumplir los 4 años de edad, en la Escuela "Don Ángel Mottola" ubicada en Barcelona, hasta el año 2004. En el 2002 inicia sus estudios de violín y mandolina con el maestro Estelio Padilla. Para conocer un poco más sobre Marcel; su formación, sus presentaciones y reconocimientos, te invito a visitar el Portal Musical de Venezuela. Marcel es muestra de que nuestros niños y jóvenes toman en serio nuestra música, aman nuestro folklore, si reciben el apoyo, ejemplo y motivación de nosotros como padres y maestros. Ellos son tierra fecunda, y la responsabilidad de sembrar se encuentra en nuestras manos. Tenemos la generosa semilla de nuestra música, siempre deseosa de germinar, ante todo debemos preservarla. Con mucho orgullo de padre, de docente, de venezolano, quiero hacer llegar a Marcel Montcourt mi más fraternal saludo, con la plena seguridad de que lo que has logrado hasta hoy es apenas el retoño de un gran árbol de triunfos a favor de lo nuestro que te espera en la vida. Que sigas siendo ejemplo para nuestros hijos, alumnos, y a todo venezolano que valora sus herencias culturales. AG

viernes, mayo 19, 2006

El Cuatro Venezolano

Uno de los instrumentos mas importantes y emblemáticos de nuestro país. Tal vez estamos viviendo un momento histórico, en cuanto a su difusión, impulsado por la Ley Resorte y el resurgimiento del interés por el rescate de nuestros valores nacionales. Dentro de la formación del Profesor de Educación Musical es sumamente importante conocerlo bien; sus orígenes y sus partes, además de su ejecución.

Sobre la historia del cuatro, es algo complicado definir una línea precisa en cuanto a sus orígenes. Según investigaciones hechas por Key (2005), su origen procede de Asia ya con el nombre de guitarra, en el 1300 A.C., pero maneja una información mas precisa de que en España, durante el reinado de Alfonso El Sabio, ya se conocía con el nombre de guitarra latina. Se supone que la Península Ibérica estuvo influenciada de forma paralela, por el norte por la guitarra y por el sur por el laúd, a raíz de la invasión árabe. Se han encontrado evidencias de que en el siglo XVI se comienza a editar música dedicada a la guitarra de cuatro órdenes, llamada también renacentista. La Guitarra Pequeña, otro de los nombres con que se le conocía entonces a lo que hoy llamamos Cuatro, se tocaba rasgueada; en cambio la Vihuela tenía seis o siete cuerdas y se le tocaba punteada, y la Contra Canaria poseía sólo cinco cuerdas. Resulta curioso entonces, que el Cuatro tiene un antecesor común al de la que hoy día conocemos como Guitarra Española; tal instrumento era pequeño y tenía cuatro cuerdas. El Cuatro no deriva de la Guitarra Española entonces, casi se podría decir lo contrario. Este instrumento, como todos nuestros instrumentos tradicionales, ha tenido una situación nómada, en el sentido que ha recorrido parte del continente europeo como Francia, Italia y los Países Bajos.

A la llegada de los españoles a tierras americanas, éste instrumento se convirtió en uno de los principales compañeros del conquistador, por lo que a partir de es momento fue adoptado por los nativos de América Latina, específicamente en Venezuela. La presencia de este instrumento musical en nuestra cultura es emblemática, como nuestros géneros musicales típicos. Son muchas las modalidades en que se presenta con respecto a su encordadura y afinación; por ejemplo en el estado Lara, podemos apreciar una variedad de éste instrumento con un número variado de cuerdas que llega a tener de cuatro a cinco, seis y hasta ocho cuerdas y es protagonista en la manifestación que se conoce como Tamunangue. En el resto del país aparece con la encordadura de cuatro cuerdas y la afinación conocida que de acuerdo a las notas del diapasón serían La-Re-Fa#-Si.

Según Adolfo Salazar, "El Cuatro nace como modificación del Quinto, siempre elaborado en forma muy rústica, usando para ello, trozos de madera autóctono y cuerdas de fibra vegetal, muy duras, las cuales se adelgazaban con conchas de moluscos, más adelante con tripas de animales, siendo disecadas y templadas al sol, a objeto que emitieran sonidos que en cierto modo, igualaran a los expedidos por los instrumentos españoles."

En si, los aborígenes y esclavos, buscaban en ese instrumento que acompañaban con guaruras, pitos, tambores y maracas, momentos de esparcimiento y un aliciente para llevar menos pesada la existencia a la que estaban sometidos por los conquistadores.

Para el Siglo XIX, algunos carpinteros de profesión, en sus ratos de ocio, construían este instrumento, solo por afición a la música, para amenizar las parrandas, bailes típicos, etc. Las primeras transacciones que se hicieron con el Cuatro, son las llamadas permutas por los artesanos, ó sea, que a cambio de éste, los carpinteros recibían turrones, arroz con coco, empanadas, jaleas de mango, y otras meriendas típicas, entre otras cosas.

Las maderas mas utilizadas en su fabricación son el cedro y el pino, generalmente el diapasón y la media tapa se fabrican con maderas preciosas, para que no se rayen ni desgasten con el roce de las uñas.

Tanto en la música popular como en la académica está presente este instrumento, de hecho existe uno especial para conciertos, construido bajo criterios de calidad y equilibrio de voces, sonoridad, facilidad de ejecución y pulcritud artesanal. Por lo general, cuenta con más trastes, las maderas son más duraderas, su acabado es más fino y su costo es mayor al de un cuatro tradicional.

El arraigo del cuatro en la música venezolana va hasta su adecuación a los nuevos tiempos. Es así como se encuentran cuatros de fibra de vidrio, la última creación del luthier venezolano, Luis Ruiz. Este cuatro cuenta con salida de audio, reguladores de volumen, ganchos para colocarle correa sujetadora (tipo guitarra eléctrica) y su caja de resonancia es de fibra de vidrio.

Es un instrumento para ser ejecutado como solista y también como acompañante y está presente en todas las regiones de Venezuela.

En su desempeño como instrumento solista, el cuatro ha recibido aportes de grandes músicos, como el del ya desaparecido, Freddy Reyna, quien lo llevó a escenarios internacionales y además creo un método novedoso para ejecutar este instrumento.

Hernán Gamboa también aporta su técnica del "rasgapunteao", en la cual se combinan el charrasqueo con el punteo propio de la guitarra, así como acordes bastante complejos para lograr una sonoridad única.

En la actualidad, es importante la labor de José "Cheo" Hurtado, quien además de ser excelente solista, tiene el mérito de haber tocado su instrumento en combinación con una orquesta sinfónica.

Asimismo, viene abriéndose paso una nueva generación de cuatristas que prometen seguir difundiendo la imagen de Venezuela por el resto de los años, dentro y fuera del país.

El arraigo del cuatro en la música venezolana va hasta su adecuación a los nuevos tiempos, tanto en la música popular como en la académica está presente este instrumento.

El cuatro llega al siglo XXI y promete quedarse alojado por siempre en la idiosincrasia de los venezolanos, cantando historias, sonando amores, vibrando cultura.

Es de suma importancia para la difusión de nuestro instrumento nacional, iniciativas como La Siembra del Cuatro, que "articula un conjunto de metas en el cual la conjunción de ejecutantes, autores, luthieres, personalidades, instituciones culturales y educativas de todos los niveles y, muy especialmente, las universidades puedan liderar un proceso que condicione una transformación radical en la cultura musical del venezolano y el fortalecimiento de los valores nacionales" 

A veces resulta asombroso, como algunos músicos venezolanos, y hasta quienes aspiramos llegar a ser Docentes, no conocemos y no sabemos cómo tocar el Cuatro. Dentro de la formación de todos nuestros músicos (académicos, populares, etc.) debería tomarse la enseñanza del Cuatro como una necesidad, como un principio básico, como conocimiento originario. El Cuatro es un instrumento noble, accesible, presente, que se hace querer. Sólo queda de nuestra parte darle el muy merecido "Sí" y no temer a ser alimentado con su "cambur pintón". ¿Te animas?